Улаанбаатар, Héroe Rojo

Este escudo es la fiel representación de la capital mongola, Ulán Bator. Garudá es un ave mítica de fuerte representación, es el dios de la montaña sagrada del sur de la capital, pero lo mágico de este mitológico personaje, es que hace parte de la historia más antigua de Mongolia y fue adaptada a las creencias budistas. El corazón de Asia se adapta y lleva sus tradiciones a la modernidad

En su mano derecha sostiene una llave, muestra de prosperidad y franqueza, en la mano izquierda una flor de loto, que para la fe budista indica un nacimiento divino, aunque para los mongoles y su capital, representa paz, igualdad y pureza. La serpiente es símbolo del mal y de lo intolerantes que son los mongoles ante él.

Ulán Bator es todo lo que indica su escudo, es fuerte pero a la vez comprensiva y acogedora, cuando las personas llegan allá, se dan cuenta de la mezcla entre tradición y modernización, se dan cuenta de la manera de vivir de los mongoles y a la vez, reconocen el espíritu de crecimiento que se ha fortalecido en los últimos años bajo cambios en su gobierno y bajo cambios en sus expectativas como mongoles en general.

Su capital es un gran atractivo turístico, es más, quienes hemos visitado este increíble lugar, reconocemos que si se quiere entender a Mongolia con su cultura y sus raíces, Ulán Bator es el lugar preciso, es de esos lugares en los que se puede encontrar de todo. Se puede disfrutar del silencio y el respeto por la fe, pero también del ruido característico de una ciudad capital cualquiera.

Es posible encontrar fuertes marcas de la cultura mongol nómada combinada con majestuosos edificios que representan la industrialización y la característica de modernización que se ha querido resaltar a lo largo de esta entrada, como símbolo de avance y progreso de Mongolia. 

El ger, es una vivienda adecuada para un lugar con paisajes tan agrestes y para la cultura nómada que predomina en este país, es fácil construirlo y fácil desmontarlo, y por supuesto, el transporte es sumamente sencillo. Es por eso, que estas particulares casas se pueden encontrar por toda Mongolia, desde el campo, hasta “barrios” hechos de gers en las ciudades.

A pesar de que algunas familias han pasado a ser sedentarias, el uso de este tradicional hogar no se ha disminuido. Puesto que estos nuevos sedentarios lo que hacen es fijar la casa,  teniendo cuidado de que su puerta quede mirando hacia donde sale el sol, para así, y tal como lo dicta la cultura, el sol entre a sus hogares por la puerta. DE esta forma se han mantenido vivos los ger, construcciones cuyo origen se remonta alrededor de los años 2500 y 3000 a.C.

La plaza de Sükhbaatar, ubicada en el centro de la capital, es un reconocimiento a la historia de Mongolia, es el lugar donde se declaró la independencia en 1921 y es una mirada al pasado con la posibilidad de traer al presente a su forjador, Damdin Sükhbaatar, cuya estatua erigida recuerda la liberación de Mongolia de la  ocupación China.

La imponencia de esta plaza no termina con la estatua de este héroe nacional, en su parte norte es posible ver el edificio del parlamento mongol, presidida por una estatua de Genhis Khan, forjador del imperio mongol, representante de la fuerza de los mongoles.

El Héroe Rojo, o Ulan Bator, es un lugar con múltiples sitios de obligatoria visita, sin embargo, acá se pretendía dar muestra de la historia de esta ciudad, nombrando lugares de mucha fuerza tanto histórica como tradicional, demostrando que aún la costumbre se vive en los aspectos más comunes de la vida cotidiana de un mongol, y dejando entrever la riqueza de su cultura y de su semblanza.